Los científicos llevan años estudiando a los tardígrados, esos minúsculos invertebrados conocidos como "osos de agua", pero nadie esperaba que fuesen capaces de sobrevivir a esto. Un equipo de la Universidad Westlake de China ha logrado algo que parece sacado de una película de ciencia ficción: grabar patrones microscópicos en la superficie de estos organismos mientras estaban en estado de criptobiosis, consiguiendo después que revivieran sin aparente daño. El estudio ha sido publicado en Current Biology.El experimento va mucho más allá de una simple curiosidad científica, ya que demuestra por primera vez que es posible modificar la superficie de un ser vivo a escala nanométrica sin comprometer sus funciones vitales. Los investigadores han utilizado una técnica llamada litografía sobre hielo, que permite trabajar con estos organismos a temperaturas extremadamente bajas.Los tardígrados siguen sorprendiendo a la ciencia con su resistenciaAquí se puede apreciar perfectamente el "tatuaje" en el animalPara entender la magnitud del logro hay que saber que estos organismos microscópicos tienen una capacidad única: pueden entrar en un estado donde detienen casi por completo sus funciones metabólicas para sobrevivir a condiciones extremas. Esta habilidad, llamada criptobiosis, ya había sido documentada en estudios sobre su increíble resistencia a la radiación.Durante el proceso, los científicos recubrieron a los tardígrados con una capa de anisol sólido a -130°C para después utilizar un haz de electrones que creó estructuras de apenas 72 nanómetros, aproximadamente mil veces más finas que un cabello humano. Lo realmente sorprendente es que al rehidratarse, los tardígrados recuperaron su actividad …