GSMA ha publicado este jueves la primera especificación de la eSIM que permite a los consumidores activar de forma remota una tarjeta embebida en sus dispositivos como smartwatch o tablets. Es la primera iniciativa ante la necesidad de conectar productos del Internet de las Cosas. Más tarde llegarán los smartphones.
Las tarjetas SIM de plástico van a morir. El año pasado conocimos que grandes tecnológicas como Apple y Samsung estaban trabajando, junto a las operadoras, en la creación de un estándar en consenso que permitiese el empleo de tarjetas SIM embebidas y reprogramables.
La eSIM es una tarjeta embebida que no se podrá o necesitará ser extraída del dispositivo, algo fundamental para muchas aplicaciones del futuro (Internet de las Cosas y comunicación máquina a máquina). La GSMA está trabajando en su implementación desde julio de 2015.
La información alojada en esta tarjeta embebida será reescribible por el operador de forma remota, lo que en la práctica supondrá que cualquier usuario podrá cambiar de operadora en segundos gracias al software de ese dispositivo o a través de cualquier otra vía. No necesitarás una nueva SIM, no tendrás que esperar horas o días en cambiar tu conexión a la red a través de una nueva operadora y, como clave en el Internet de las Cosas, podrán existir sistemas no accesibles por el usuario o wearables conectados a la red móvil.
"Es inevitable." declaraba para Hipertextual Antonio Coimbra, consejero delegado de Vodafone España, el pasado mes de septiembre en relación a la sustitución de las tarjetas SIM …