Germán nos envió una referencia a un artículo de Letras Libres, Borges y sus “precursores” donde se habla de la famosa Biblioteca de Babel que tan exquisitamente describió en su libro Ficciones y que tanto nos apasiona por aquí.
Pocos autores se han divertido tanto como Borges reescribiendo y transfigurando las obras de los otros. Ejemplo de ello son estos tres relatos (…) materiales que el autor de El Aleph leyó, vampirizó y transformó memorablemente.
El propio Borges lo reconoció:
Como sabemos, en el prólogo de El jardín de senderos que se bifurcan (1941-1942) –libro incluido más tarde en Ficciones (1944)– Borges precisó: “No soy el primer autor de La biblioteca de Babel; los curiosos de su historia y de su prehistoria pueden interrogar cierta página del número 69 de Sur, que registra los nombres heterogéneos de Leucipo y de Laßwitz, de Lewis Caroll y de Aristóteles.”
El artículo en cuestión es bastante largo e interesante e incluye el relato original de Laßwitz, «el padre de la ciencia-ficción alemana». Laßwitz estudió matemática y física en la Universidad de Breslau y en la Universidad de Berlín y se doctoró en dichas materias en el año 1873. Su relato se llama La biblioteca universal.
Laßwitz a su vez menciona a Lewis Carroll como precursor de la idea:
«Carroll (…) observa que siendo limitado el número de palabras que componen un idioma, lo es asimismo el de sus combinaciones posibles o sea el de sus libros (…) La idea básica de Laßwitz …