La temporalidad en la industria de la moda puede denotar que el esfuerzo para colocar prendas en aparadores y pasarelas se reduce sólo a unas semanas; sin embargo, ese sólo es un espejismo semántico, porque desde la primavera hasta el invierno se trabaja, no de manera temporal, pero sí cotidiana para brindar innovación y tendencias ...