Google, en el 2007, inició un concurso -dotado con 20 millones de dólares- para el grupo que mandase una nave a la Luna, aterrizara en ella y mandase fotos a la Tierra. Pero como algunos predijeron, el premio -aunque parecía jugoso- era insuficiente y el tiempo demostró esto. Las cinco empresas que llegaron al final del camino no pudieron tener lista su sonda para la fecha solicitada y Google canceló su reto. Sin embargo, una de las compañías, SpaceIL, de Israel, decidió continuar con el esfuerzo y finalmente lanzaron una nave hacia la Luna.
Al tratar de alunizar, la sonda Beresheet tuvo un fallo en su motor principal, el cual se apagó y muy poco tiempo después sólo hubo silencio. Cuando se pudo recuperar la comunicación, Beresheet se había impactado en el satélite natural de la Tierra. “Israel llegó a la Luna. El viaje de Beresheet no ha terminado“, dijo el presidente de SpaceIL, Morris Kahn. “Yo espero que la siguiente generación de Israel complete la misión por nosotros”.
La comunidad respondió a SpaceIL, que fue parte original de los grupos que compitieron en el Google Lunar X Prize, que como ya dijimos, no tuvo ganador. Sin embargo, la Fundación X Prize indicó que le daría el premio de 1 millón bautizado como “Moonshot Award” (Premio Disparo a la Luna) para el equipo, a pesar de haber fallado en el aterrizaje. Buzz Aldrin, el ingeniero del comando lunar de la Apolo 11, comentó en Twitter: “Nunca pierdan la esperanza- ¡su duro trabajo, …