Esta mañana, poco antes de las 12 del mediodía, la sonda BepiColombo alzanzaba la distancia mínima a Mercurio en su segundo sobrevuelo del planeta, pasando a tan sólo 200 kilómetros de su superficie. El sobrevuelo forma parte de las maniobras diseñadas para que en el 5 de diciembre de 2025 la gravedad del planeta termine por capturarla. Pero de aquí a entonces le quedan otros cuatro sobrevuelos del miembro más cercano al Sol del Sistema Solar. Y esto después de haber hecho ya otro sobrevuelo de la Tierra y dos de Venus desde que la misión fuera lanzada el 20 de octubre de 2018 .
Todas esta intricada coreografía planetaria es necesaria para adaptar la energía de la sonda la del planeta sin que se pase de largo y sin que caiga al Sol. Cuando fue lanzada, tenía una energía orbital similar a la de la Tierra tanto en cuanto a su velocidad de traslación alrededor del Sol como en su distancia a nuestra estrella.
Así que tenía que adaptarse a la de Mercurio. Y no tenemos ningún cohete lo suficientemente potente como para hacer esa adaptación al lanzamiento. Por no hablar de la cantidad de combustible que sería necesario para ello y que se comería la masa disponible para la sonda. Así que las personas que diseñaron la misión decidieron utilizar maniobras de asistencia gravitatoria. Las tres primeras –con la Tierra y Venus– fueron básicamente para que la sonda fuera cayendo, pero de forma controlada, hacia el Sol. Las …