Con el estancamiento del smartphone, una de las tendencias que más ha emergido durante el Mobile World Congress 2016 es la salud. Analizamos sus propuestas.
El smartphone ha sido, durante los últimos cinco años, el epicentro de todas las noticias y novedades tecnológicas. El anuncio del próximo Galaxy o del siguiente HTC One se seguía con expectación e intensidad. El crecimiento de las plataformas móviles y sus posibilidades se observaba con lupa. Año tras año, mes a mes, semana a semana.
Ahora el paradigma es muy diferente. El mercado roza unos niveles de saturación y homogeneización que dejan poco margen de crecimiento a los fabricantes —exceptuando los mercados emergentes—, obligándoles a buscar nuevas categorías de producto que suplan el papel que el smartphone ha desarrollado durante los últimos años.
La salud y el fitness, dentro de ese conjunto de nuevas tendencias, es una de las más fuertes. Las principales compañías del sector tecnológico están haciendo mucho énfasis en ella con productos como pulseras monitorizadoras, smartwatches y otros productos centrados exclusivamente en la medición de las constantes vitales.

Durante la última edición del Mobile World Congress, esa situación ha quedado fielmente reflejada. Junto al smartphone y al 5G, se encontraban con frecuencia productos de esta categoría, más incluso que en años anteriores, asentando así el crecimiento progresivo de este nuevo segmento.
En HTC, por ejemplo, la mitad de su booth estaba dedicado a productos de fitness y salud en colaboración con la prestigiosa compañía deportiva Under Armour. Allí era posible encontrar productos como pulseras de …