Una estudiante holandesa de 20 años abrió la cuenta @catcallers para subir selfies que se tomó durante un mes con quienes la acosaban en las calles.
La libertad de expresión que ofrecen las redes se extiende a la denuncia del machismo y el acoso sexual cotidiano que viven en su mayoría las mujeres. Tal es el caso de una joven que decidió usar Instagram para subir un tipo de selfies muy peculiares. Se trata de Noa Jansma, de 20 años de edad, que durante un mes se tomó fotos con los hombres que le hacían insinuaciones en las calles de Eindhoven, Holanda, donde estudia diseño.
Jansma abrió la cuenta @catcallers, palabra en inglés que por definición significa un silbido, piropo o abucheo, para demostrar que este tipo de expresiones son todo menos un cumplido. La holandesa explicó en entrevista a Buzzfeed que su proyecto nació a partir de una discusión que tuvo en clase con sus compañeros. "Me di cuenta de que la mitad de la clase, las mujeres, sabían de qué estaba hablando y lo vivían a diario. Y la otra mitad, los hombres, ni siquiera pensaron que esto seguía ocurriendo. Algunos incluso no me creyeron", dijo.Al final del mes subió 24 fotografías que tomó al momento de ser acosada por uno o varios hombres, aunque señaló que le faltaron aquellas que ocurrieron en situaciones más riesgosas, como de noche y cerca de un callejón oscuro. En cada post añadió el "piropo" o la acción de sus acosadores. Hasta el …