El genocidio resultante dejó abandonados un gran número de terrenos dedicados al cultivo, que fueron ocupados por árboles, disminuyendo el dióxido de carbono atmosférico y bajando las temperaturas.
Desde el siglo XV y hasta mediados del XIX, el planeta Tierra experimentó una brusca bajada de las temperaturas globales, que a día de hoy se conoce c… Seguir leyendo...