La Comisión Europea podría regular por completo la presencia de la peligrosa y cancerígena acrilamida en los alimentos. Pero en vez de eso, ha reculado bajo presión de la industria.
Ciertos documentos filtrados recientemente apuntan a que la mala influencia de la industria alimentaria ejercida sobre la Comisión Europea podría poner en peligro la regularización de la presencia de acrilamida en los alimentos. La acrilamida es una sustancia derivada de la cocción (excesiva) de la comida y es cancerígena. Debido a las evidencias existentes de sus efectos perniciosos para la salud, la Comisión Europea no puede tolerar la presencia de ninguna cantidad de esta sustancia. Sin embargo, según apuntan las fuentes, la industria ha presionado recientemente hasta conseguir relajar los términos de la legislación.
¿Qué es la acrilamida y qué hace en mi comida?
La acrilamida es una sustancia incolora e inodora soluble en agua (y otras sustancias) que se produce de manera natural al cocinar los alimentos demasiado. Es decir, esta sustancia solo aparece cuando la comida es procesada a altas temperaturas a partir de la reacción de azúcares y aminoácidos. Esto es frecuente en productos horneados y fritos, donde suele ocurrir la reacción química que la forma como consecuencia del sistema de cocinado. Hasta aquí todo sería normal si no fuera porque tenemos numerosas evidencias de que la acrilamida es un carcinógeno potencial muy peligroso. Actualmente sabemos con certeza que esta sustancia produce cáncer en ratas y ratones.
Las patatas fritas se encuentran entre los alimentos con más riesgo de contener acrilamida
Todavía …