Hay juegos que de cuyo perfil se presta para que sean jugados hasta por quienes jamás en su vida han jugado un videojuego, entre ellos los padres y adultos mayores. Animal Crossing es un claro ejemplo de ello, sobre todo cuando vemos casos como el que recientemente se ha comenzado a viralizar en redes sociales y que muestra las miles de horas que una abuelita le ha invertido al juego.