Tras conocer las filtraciones y rumores en torno a los nuevos iPhone, que serán presentados mañana martes 10 de septiembre, los inversionistas ven poco interés en el evento, de acuerdo con la firma financiera JP Morgan.

Se piensa que los cambios de la nueva familia de smartphones harán que sea un “año oportuno” para Apple, es decir, para que reutilice los ahorros típicos de la cadena de suministro y haga que la línea general sea más barata. Comportamiento que podría cambiar en 2020, cuando se presente el iPhone 5G y, con él, un leve incremento en los costos.

Además, reportes previos indican que los teléfonos del próximo año podrían traer de vuelta el sensor de huellas dactilares, pero esta vez bajo la pantalla de los celulares, como ya lo hacen marcas como Samsung, Xiaomi y Huawei.

Este año, para los posibles iPhone 11 o iPhone 11 Pro, se esperan cámaras con triple lente para los celulares OLED, carga reversible y mejor desempeño con el que sería el próximo procesador de casa, A13 Bionic.

Para impulsar las ganancias de hardware, los analistas indican que todavía serán fundamentales las actualizaciones que podrían venir para Apple Watch y HomePod, por ejemplo.

En cuanto a servicios, se espera un impulso aún más importante cuando se lance al público la oferta de video en streaming de la californiana: Apple TV+, antes de que finalice 2019.