Mi recomendador de contenidos ya ha captado la ironía del ser humano, y hoy me sirve casi seguidos estos dos artículos,
La inmortalidad tiene fecha: 2050,
La titánica lucha contra enfermedades como el cáncer pertenecerán al pasado. Semejante predicción no puede ser sino obra de un futurólogo. Pero en el caso de Ray Kurzweil, además es experto en Ciencias de la Computación y en Inteligencia Artificial, y director de ingeniería en Google. Nunca se ha escondido a la hora de contestar a la gran pregunta: ¿podremos aspirar a la inmortalidad? Y tampoco a la segunda gran pregunta: ¿cuándo? Kurzweil responde con un tajante “sí” a la primera. Y se aventura a dar su pronóstico en la segunda: entre las próximas décadas de los años cuarenta y los cincuenta. Para todos aquellos incrédulos, sus predicciones cuentan con un 86% de aciertos.
Digamos adiós a la Tierra: hemos superado los niveles CO2 en la atmósfera y tal vez no haya vuelta atrás,
La semana pasada se alcanzó un nuevo hito en la carrera hacia el fin del mundo, ya que hemos conseguido superar el temido umbral de 400 partes por millón de concentración de dióxido de carbono en la atmósfera. Permanentemente.
Pero ¿por qué es tan fatídico ese número? Desde hace varios años, la comunidad científica nos ha estado advirtiendo de que si se permitía que el volumen de dióxido de carbono superara las 400 partes por millón, se alcanzaría un punto de inflexión de graves consecuencias. El Ártico fue la …