El diseño gráfico es parte de la vida de la mayoría de las personas. Las compañías que venden algún bien o producto normalmente se identifican con un nombre y/o logotipo, de manera que los posibles consumidores (clientes al final de cuentas), identifiquen este producto y lo asocien con una marca particular, la cual puede ser incluso como un nombre genérico. Por ejemplo, todos sabemos que cuando decimos la palabra “kleenex” nos referimos a los pañuelos faciales, aunque “kleenex” sea un producto específico de la empresa Kimberly Clark.
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Así, una inmensa mayoría de productos son parte de alguna marca que tiene una imagen que la identifica. La gente tiende, al menos en teoría, a comprar productos de marca cuando está en sus posibilidades. Por ejemplo, si alguien adquiere un Rolex, no lo hace para ver la hora, porque para ello podría comprarse un reloj Casio de 40 dólares (otra marca que se identifica como productos electrónicos de bajo costo), que le daría la hora con extrema precisión. No, Rolex vende su prestigio, el poder decir que se tiene algo que es más que un reloj, es una joya, al decir del propio fabricante.
Por ello entonces, es quizás interesante saber que el 27 de abril se celebra, por una iniciativa del Consejo Internacional de Asociaciones de Diseño Gráfico, el día mundial del diseño. La asociación se fundó en 1963 en Londres.

Es pues el día de los diseñadores gráficos, quienes son profesionistas que …