Pokémon Go aterrizó en México -o algo así-, ayer por la tarde y absolutamente todos perdimos el control durante algunos momentos. Pasada la emoción inicial, la búsqueda del archivo APK para instalar en Android fue sencilla, así que todo estaba listo para comenzar con la aventura, aquella que esperamos desde hace muchos meses.
Con propósitos editoriales por supuesto, como es costumbre, nos decidimos a aventurarnos a la instalación ilegal del archivo y probar de primera mano el resultado del trabajo conjunto de The Pokémon Company y Niantic, así es que comenzamos a jugar Pokémon Go y esto nos encontramos.
Una experiencia muy familiar
Después de lanzar la aplicación y realizar el correspondiente registro con ayuda de una cuenta de Google, o eligiendo un nombre de usuario y contraseña, es momento de conocer al profesor que nos preguntará nuestro nombre y nos permitirá personalizar el aspecto de nuestro personaje. Acto seguido, viene una de las decisiones más difícil de todas:
¿Hierba, agua o fuego? Una vez seleccionado tu pokémon inicial, lo siguiente es, como de costumbre en los videojuegos de la franquicia, salir a explorar al mundo, no sin antes el profesor te de una pequeña introducción a la manera de atrapar pokémon y de cómo recolectar pokéballs.
Las poképaradas son estaciones colocadas en monumentos, estatuas o puntos de interés del mundo real, que al seleccionarlas y hacer girar un pequeño orbe te regalan herramientas para atrapar monstruos y también huevos para incubar. Como dijimos, están en puntos …