A lo largo de la franquicia Star Wars hemos podido conocer una gran variedad de especies alienígenas. Algunas trascienden dentro de la trama al presentar personajes como Ahsoka Tano y el controvertido Jar Jar Binks. Pero entre la amplia gama de criaturas, hubo una con la que George Lucas tuvo un problema: los wookies.

No vamos a negar que los wookies han sido figuras icónicas dentro de este universo desde la aparición de Chewbacca en la trilogía original. Sin embargo, Lucas tenía un plan más ambicioso para estos seres: protagonizar una batalla en El retorno del Jedi. Al final esa idea fue reemplazada por otra: partirlos a la mitad.

Como recaban en Screen Rant, originalmente se pensó en los wookies como una especie primitiva. No obstante, conforme evolucionó la saga, y a su vez el propio Chewbacca, dicho planteamiento dejó de ser coherente. Cuando Lucas por fin tuvo la oportunidad de plasmar la batalla planeada para la última entrega, optó por una versión pequeña: los ewoks.

Así se dio la presentación de estos seres. Que si bien fueron un tipo de alivio cómico para la película, su apariencia tierna fue un punto de debate entre los fanáticos. Primeramente, se cuestionó que pudieran vencer a un ejército tecnológicamente más avanzado solo con palos y piedras, además de la queja más clara: ser un producto de merchandising.

Pero ¿cuál fue el origen de estos pequeñines con apariencia …