Esta semana nos sorprendió la noticia de que Disney se retiró del mercado de los juegos de consola y ya para que un gigante del entretenimiento como la empresa de Mickey Mouse haya tomado esa decisión nos pone enfrente un foco rojo que nos indica que algo no anda muy bien. ¿Quién se iba imaginar que el año en que la empresa lanzó su juego más ambicioso en todos sentidos con licencias tan fuertes como Star Wars, Marvel, Pixar y el mismo Disney iban a evaluar como incosteable la producción de Disney Infinity? ¿Quien se iba a imaginar que ya con planes inmediatos sobre el siguiente juego y habiendo ya gastado en planeación se iba a frenar repentinamente el desarrollo del juego?