Finalmente, Mark Zuckerberg "ha dado su brazo a torcer" (entrecomillo porque aún no sabemos consecuencias reales), y se ha unido a Twitter en cuanto a comenzar a etiquetar contenido de políticos que incluya "discurso de odio", aunque lo consideren de interés periodístico (que suele ser el de políticos como Donald Trump). Dichas etiquetas llegarán con advertencias negativas hacia el mensaje publicado.
Lo que no está claro es si la compañía irá más allá que Twitter, y si además de ocultar un contenido de Donald Trump por glorificar la violencia, también lo eliminaría. Zuckerberg ha mencionado que "incluso si un político o un funcionario del gobierno lo dice [incitar a la violencia], si determinamos que el contenido puede conducir a la violencia o privar a las personas de su derecho al voto, eliminaremos ese contenido".
Esta norma de eliminar ya se aplicaba, según dijo Zuckerberg en el Congreso al ser preguntado por Alexandria Ocasio Cortez. La duda es si ahora se hará con más rotundidad con políticos, pues hasta ahora no se conocen casos en los que la compañía haya eliminado.
Precedentes de los últimos tiempos
Pero, ¿de dónde viene todo? El de la libertad de expresión es un debate que no ha hecho más que encenderse en los últimos años, tanto en cuanto a qué se debe permitir, como en cuanto a la forma en que se debe permitir. En este sentido, en los últimos meses Twitter ha tomado medidas por …