Un proyecto de Tomorrow que muestra las emisiones de CO2 en Europa para producción energía eléctrica poniendo de relieve que el coche eléctrico no es la única solución.
Con el debate abierto en muchas capitales europeas sobre las emisiones contaminantes de los coches de combustión, y con la experiencia recibida de muchas capitales latinoamericanas, pioneras en el llamado pico y placa (cierre de la circulación a coches con matricula par o impar), la conversación ahora se centra en el coche eléctrico como solución a la reducción de las emisiones de CO2.
No hay duda que los vehículos eléctricos en masa cambiarán el ambiente de nuestras ciudades, pero no está tan claro que, con el modelo energético actual, sea la solución definitiva para reducir las emisiones de CO2 a la atmósfera, por mucho que efectivamente sea una solución a corto plazo para el problema en nuestras ciudades.
¿La razón? Muchas de los países europeos basan gran parte de su modelo energético en sistemas que emiten CO2, por lo que la producción de electricidad, a día de hoy, es uno de los problemas adicionales a paliar la gran cantidad de contaminación que hay sobres nuestras ciudades.
Varios estudios en Estados Unidos, y de gran calado: en "Environmental Benefits from Driving Electric Vehicles" de Stephen P. Holland y varios autores han puesto de manifiesto que la energía limpia de los coches eléctricos no es tal si se analiza de donde viene esa energía, mostrando grandes diferencias de una costa a otra de Estados Unidos. En Europa se …