La física de partículas acaba de conseguir uno de esos avances que parecían lejanos. Por primera vez se han detectado pares de quarks top en colisiones entre protones y núcleos de plomo, gracias al experimento ATLAS del CERN, la Organización Europea para la Investigación Nuclear ubicada en la frontera entre Francia y Suiza.Según revela un estudio conducido por la Universidad Cornell, este hallazgo permite entender mejor cómo interactúa la materia en condiciones extremas similares a las que existieron poco después del nacimiento del universo, abriendo una ventana única a los primeros instantes tras el Big Bang.La clave está en los quarks más pesados del universoLos físicos analizaron datos de colisiones a energías de 8,16 teraelectronvoltios, centrándose en los quarks top, las partículas elementales más masivas conocidas. Estos quarks son aproximadamente 175 veces más pesados que un protón, convirtiéndolos en herramientas ideales para estudiar fenómenos a distancias extraordinariamente pequeñas.El equipo empleó dos métodos complementarios: uno buscaba eventos con un leptón y al menos cuatro jets, mientras que el otro identificaba dos leptones junto con varios jets específicos. Los resultados alcanzaron las 5 desviaciones estándar, el nivel que los físicos exigen para considerar válido un descubrimiento.Estas observaciones resultan fundamentales para comprender cómo se distribuyen las partículas dentro de los núcleos atómicos, conocimiento que tiene conexión directa con las teorías que proponen que nuestro universo podría haberse formado dentro de un agujero negro de otro universo.Las mediciones precisas realizadas por el equipo indican que la producción de quarks top en colisiones protón-plomo es …