En sus más de 80 años de existencia, Batman ha contado con diversas obras que lo mantienen dentro de diversos tonos, dirigidos a todo tipo de públicos.
Previo a las películas de Tim Burton, la noción del público ajeno a los cómics es que Batman seguía siendo un héroe afín al tono de productos como la serie de los 60 protagonizada por Adam West, series animadas como Super Friends o crossovers como Scooby-Doo Meets Batman de 1972.
Los filmes de Burton le dieron la oscuridad que el personaje tenía vigente en los cómics, propusieron una estética Art Deco y un tono noir que les dieron una ambigüedad temporal e inspiraron uno de los productos televisivos que mayor influencia ejerció en la década de los 90.

Batman: The Animated Series fue resultado del cambio de tono que los filmes de Burton lograron en la concepción del público general no especializado en cómics, sirvió como una extensión de los alcances que este nuevo enfoque podía tener fuera de la pantalla grande y demostró que era posible hacer animaciones de narrativas profundas que apelaran a un público más maduro, sin descuidar a la audiencia target de todas las edades.
La serie debutó en 1992 y contó con 85 episodios repartidos en dos temporadas. Su intro, definitivamente uno de los más icónicos e importantes de los 90, contó con música de Danny Elfman -quien se encargó de componer la banda sonora de las cintas de Burton- y servía como antesala del tono oscuro y la estética noir …