Los fetichistas de los objetos raros y el atrezzo cinematográfico apreciarán que alguien haya dedicado una página al vaso de Blade Runner en el que Deckard, el protagonista, se bebe un Johnny Walker como mandan los cánones detectivescos.

Según cuenta la página del famoso «vaso doble» al parecer es un diseño de Cini Boeri para una colección de Arnolfo di Cambio, allá por 1973 (la película es de 1982). Auténtica cristalería italiana fabricada a mano.

Barato desde luego no es, porque como buen objeto artístico de colección y culto tiene un precio desorbitado: se puede conseguir un vaso por 90 euros o un par de ellos por entre 134 y 158 euros, según tamaño: los hay de 22 y de 37 cl. La misma colección tiene botella, cubitera de hielos, vasos altos y hasta cenicero… Porque fumar era algo propio de 1973 aunque en el futuro nada ha cambiado y se ve que siguen con las mismas, como bien se ve en la película.

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