Los Su-35S son los aviones de combate más potentes y avanzados en servicio activo de las Fuerzas Aeroespaciales rusas. A lo largo de la primera década desde su primer vuelo, el caza pesado ruso vivió varias mejoras para mantenerse vigente contra su principal 'rival' y objetivo, el F-22 estadounidense, escribe el portal de la cadena rusa Zvezda.