La infiltración de empleados norcoreanos en grandes tecnológicas occidentales es una amenaza real y creciente. Así lo recoge una investigación de The Register, que detalla cómo estos falsos trabajadores utilizan identidades robadas, inteligencia artificial y todo tipo de argucias para pasar desapercibidos en los procesos de contratación de algunas de las empresas más potentes del sector.Según esta fuente, miles de norcoreanos ya han conseguido empleos en compañías de la lista Fortune 500 y están empezando a mirar también hacia Europa. Su propósito es doble: ganar un salario en divisas fuertes y acceder a información sensible que luego filtran cuidadosamente para evitar ser detectados.Así logran colarse: deepfakes, perfiles falsos y entrevistas amañadasLos métodos son variados y cada vez más refinados. Muchos perfiles de LinkedIn están generados con ayuda de IA, lo que les permite aparentar una trayectoria profesional sólida y verosímil. Además, operan desde granjas de portátiles en Estados Unidos, gestionadas por intermediarios que alquilan sus domicilios para simular conexiones locales y sortear bloqueos geográficos.En las entrevistas técnicas, es habitual que varios colaboradores participen en segundo plano mientras una persona actúa como portavoz. Aun así, hay momentos en los que el engaño se tambalea. Adam Meyers, de CrowdStrike, menciona una pregunta concreta que suele dejarles sin respuesta: “¿Cuánto pesa Kim Jong Un?”. No pueden bromear ni dar una opinión sincera sobre su líder, así que optan por desconectarse sin más. Este tipo de infiltraciones no son nuevas. Ya en 2024, Google destapó una red de acceso remoto y robo de identidades, …