Hasta ahora, las armaduras del Pentágono se han diseñado pensando en el hombre. Los equipos de combate que vistieron las mujeres del ejército en Afganistán e Irak no se adaptaban a sus curvas, especialmente al tamaño del torso, ni protegían bien sus genitales (los ovarios se sitúan por encima de los testículos y el pene).Read more...