Resulta que los usuarios no estaban enterados de que su Nest Guard tenía un micrófono en su interior. Y cómo lo iban a saber, si la misma Google, la dueña de la compañía de cámaras y termostatos, lo ocultó.

“El micrófono integrado no fue pensado para ser un secreto y debió haber estado listado en las especificaciones técnicas”, declaró un representante de la compañía Business Insider. “Fue un error de nuestra parte”.

Agregó que este componente nunca ha estado encendido, sólo se activa cuando el usuario lo habilita.

Entonces, ¿cuál es el motivo de su integración en Nest Guard? Aparentemente, se incluyó originalmente para añadir nuevas características de seguridad; un ejemplo, detectar cuando un cristal o vidrio se rompe.

Vale la pena recordar que hace unas semanas, Google mandó correos a los clientes de sus cámaras de videovigilancia Nest, en los que los invita a estar atentos para evitar cualquier tipo de intrusión.

Lejos de ser reconfortante, el mensaje fue calificado como críptico, ya que no admitía ninguna responsabilidad por parte de Nest o Google.

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En 2014, Google compró Nest, tanto su división de cámaras como la de termostatos, por alrededor de 3.2 mil millones de dólares.