Parece sacado de una película de intriga, pero la nueva ola de cibercriminalidad ha obligado a intentar anticiparse a los delitos. El ciberespionaje más propio de James Bond se hace realidad dede una empresa del País Vasco. Countercraft es la única empresa de contrainteligencia del oeste de Europa. Los ciberataques ya son un hecho frecuente para la inmensa mayoría de las empresas y gobiernos, y se espera que con el tiempo estos ataques se vayan recrudeciendo más y más. Al fin y al cabo, el dinero y la información se encuentran hoy en día al alcance de cualquiera, y eso también lo saben los delincuentes, que han puesto sus ojos sobre la red de redes.
Pero no sólo los ciberdelincuentes utilizan internet como arma, también lo hacen empresas y gobiernos. Cuando Rusia invadió Georgia hace 12 años lo primero que hizo fue paralizar los medios de comunicación y bancos mediante una serie de ciberataques. Las guerras del futuro se libran así, desde la distancia que permite un ordenador. Algo que ahora se ha vuelto muy común. En España cada uno de los ejércitos de tierra, mar y aire tienen sus divisiones de «hackers» y cibermilias que cada vez cobran más importancia para defender y atacar el país, pero aún queda mucho trabajo que hacer.
«La ciberseguridad hasta ahora ha consistido en construir algo parecido a un castillo medieval, levantando cada vez más muros y cavando más fosos para que los enemigos no puedan entrar al palacio. El problema es …