Debido a las peculiares circunstancias que nos ha tocado vivir, el equipo de DesignLibero (Libero Rutilo y Ekaterina Shchetina) ha creado este diseño conceptual que puede verse en DesignBoom: una auténtica mochila-burbuja personal.

En teoría funciona: la base es una mochila de la que sale la burbuja de plástico de aproximadamente algo más de un metro de circunferencia que llega hasta hasta la altura de las rodillas. Se infla con un motor inflador y también tiene filtros antivirus y antipolución. Incluye un ventilador para renovar el aire y unos paneles solares para recargar la batería.

Para «salir de la burbuja» tan solo hay que abrir la cremallera, que es como se unen las dos partes que componen el invento. Veremos si pasa de la fase de concepto y acaban vendiéndolo en las tiendas. Definitivamente, aquello de «vivir en una burbuja» puede que acabe convirtiéndose en una auténtica y extraña realidad.
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