Semana convulsa. Ha ocurrido lo que llevamos esperando años. Netflix ha puesto en marcha en España y otros países su plan para acabar con las cuentas compartidas sin pagar. Desde ahora, la compañía no permitirá, salvo mediante el uso de subcuentas pagadas, utilizar una misma cuenta en dos o más hogares.
No por ser previsible ha sido menos sorprendente. Lo de "acabar con las cuentas compartidas", como concepto, es uno de los grandes melones que la industria tecnológica lleva años sin abrir. Netflix ha sido la primera gran compañía en hacerlo. Por ello, pese a darse de forma bastante limitada en alcance y fuera de su gran mercado, Estados Unidos, es uno de los mayores experimentos tecnológicos de la historia.
Por lo que va a suponer para el mayor gigante del streaming (que decidirá ampliarlo o no en función de cómo salga), por lo que va a suponer para la era de la suscripción y, sobre todo, por todo lo que que va a contar a sus competidores. Enfrentándose al mismo problema, no tendrán que ser valientes y tirar la primera piedra.
Spotify propone. Netflix ejecuta
El miedo a que se corte el grifo de las cuentas compartidas lleva años entre el público que usa suscripciones. Ocurre tanto en aquellas como Netflix, pensadas para un hogar, con configuración en perfiles, como en aquellas que directamente proponen planes familiares, como Spotify o Apple Music. En el fondo, piden lo mismo: usa tu cuenta con gente que conviva contigo.
La realidad es …