Es como un mal sueño. De repente, cuando no te lo podías esperar, una notificación al teléfono móvil te avisa de una delicada situación: una fotografía te muestra totalmente desnudo. Lo peor: se está difundiendo por distintos perfiles de redes sociales. Pero no eres tú, no es real; es un fotomontaje aunque tan perfectamente hecho que llega a confundir. En los últimos años se han popularizado distintos servicios digitales basados en software de Inteligencia Artificial capaces de generar «deep fakes» con solo una imagen.
Un hecho que puede derivar en un delito. Esta semana se ha detectado que un canal de Telegram, aplicación de chat similar a WhatsApp, había reactivado un programa informático que «desnuda» a mujeres anónimas. Las creaciones se distribuían por medio de este canal, lo que despertó las dudas de los investigadores, según un informe de la empresa de ciberseguridad Sensity. Tenía un impacto masivo: más de cien mil seguidores.
Los fotomontajes se producían desde Deepnude, una herramienta de manipulación fotográfica que saltó a la fama hace un año. Ha sido denunciado por varias mujeres. En Italia, el regulador de protección de datos ha abierto una investigación para solicitar las informaciones pertinentes al servicio de mensajería Telegram, donde se encuentra la aplicación. La comunidad estaba centrada en Rusia, pero muchos de sus seguidores provienen de España.
La clave de esta investigación se encuentra en que las creaciones en las que las chicas aparecían desnudas se hacían sin su consentimiento, que es de obligado cumplimiento por el …