No se ha determinado aún el origen de las balas encontradas en Cantoblanco y el club de tiro próximo niega cualquier responsabilidad.
Los expertos valoran la responsabilidad del CSIC y la Universidad Autónoma de Madrid en este caso.El hallazgo de proyectiles en las inmediaciones del Instituto de Física Teórica (IFT) y del Instituto de Ciencias Matemáticas (ICMAT), que han causado diversos daños materiales en el edificio que ambos centros ocupan, sigue sin resolverse aunque las primeras denuncias datan del año 2012. Los investigadores del campus madrileño de Cantoblanco lamentan que sus quejas hayan caído en saco roto, a pesar de que las balas, que proceden supuestamente del club de tiro cercano, hayan provocado mellas en las paredes, cristales rotos y el sonido constante de los disparos. "Hasta que pase una desgracia", comentaba un estudiante del IFT consultado por este medio.
Los investigadores llevan cuatro años denunciando el grave riesgo que corren al trabajar bajo la amenaza de los tiros
La semana pasada, Manuel de León denunció haber recogido 18 balas en cinco minutos en los alrededores del edificio donde trabaja. El antiguo director del centro de Matemáticas, que fue cesado por el CSIC tras un episodio de acusaciones cruzadas de irregularidades que ha sido judicializado, lamentaba que en los últimos cuatro años no se hubiera hecho nada. Los proyectiles parecen proceder del Club de Tiro Cantoblanco, gestionado por la Federación Madrileña de Tiro Olímpico y el Restaurante Club de Tiro Cantoblanco, lugar donde impulsó su "imperio" el …