Sabemos que cuando hablamos de Guilty Gear (y su hermano Blazblue) muchas personas se abruman por la terrible curva de aprendizaje. Desde el punto de que hay dos tipos de guardias, millones de combos (de esos que se realizan botón por botón) y poderes especiales que causan estados anormales, para aquellos que llegan de Street Fighter o King of Fighters puede ser una experiencia muy complicada y ya no digamos de aquellos quienes su primer juego de peleas es Guilty Gear