Desde la Universidad de Stanford llega Doggo, un robot de cuatro patas que, semejante a los robots cuadrúpedos que ya hemos visto en otras empresas, tiene algo que lo diferencia: su bajo costo y accesibilidad. En lugar de costar decenas de miles de dólares, Doggo cuesta menos de 3.000. Desde el laboratorio de Movilidad Extrema