Por Javier Martín para Think Big. El reconocimiento facial se ha convertido, en un breve período de tiempo, en uno de los elementos más usados a lo largo y ancho del mundo en materia de inteligencia artificial. Se encuentra en el día a día y se muestra, muchas veces, sin que las personas se den cuenta de que está ahí.
Se puede encontrar en diversos sitios. Por ejemplo, para desbloquear los últimos iPhones de Apple y habilitar los pagos, en aeropuertos como los indios o los japoneses en los que en breve dispondrán de dispositivos de reconocimiento, en algunos bancos chinos, o incluso la Casa Blanca está desarrollando un sistema semejante.
Lo cierto es que el reconocimiento facial es una herramienta muy usada dentro de organismos tanto públicos como privados y eso está conllevando una línea de acción respecto a la misma bastante laxa.
Informe del AI Now Institute. Desde la Universidad de Nueva York llega este estudio que confronta todas las posibilidades respecto al control facial.
El informe sugiere, por ejemplo, extender el poder de los organismos gubernamentales existentes para regular los problemas de inteligencia artificial, incluido el uso del reconocimiento facial.
También establece que se debe advertir al público cuando se utilizan sistemas de reconocimiento facial para rastrearlos y que deben tener el derecho de rechazar el uso de dicha tecnología.
Exige, a su vez, una mayor protección de los consumidores frente a la inteligencia artificial; e insta a las empresas a renunciar a las reclamaciones de secreto comercial cuando está en juego la …