Seamos sinceros, la privacidad en Internet ha dejado de existir, si es que en algún momento estuvo presente. Y es que a través de nuestra huella digital le ofrecemos pistas a las empresas de nuestros hábitos en la red, algo muy cotizado a la hora de sugerirnos publicidad, y básicamente, hacer que gastemos dinero, que es en lo que se basa esta sociedad que nos ha tocado vivir.
No obstante, a pesar de esa entrada un tanto pesimista, disponemos de múltiples formas de ocultar nuestra huella digital en la red, o al menos parte de ella. Eso sí, cada vez se requiere un mayor esfuerzo proactivo por parte del usuario. En este artículo nos hemos querido centrar en explicar en qué consiste la huella digital, y los métodos al alcance del usuario para evitar todo lo posible esa invasión de nuestra privacidad.
Diferencias entre cookies y la huella digital del navegador
Las empresas anunciantes y los brókeres de información se encargan de monetizar su conocimiento sobre nuestra actividad en línea y hábitos en la red. Mediante diversas técnicas es posible obtener información acerca de nuestro comportamiento en Internet, qué es lo que compramos, y en base a ello, crear un perfil digital para seguir sugiriéndole al usuario publicidad sobre productos relacionados.
Además, los datos proporcionados por nuestro navegador les ayuda a ampliar nuestra huella digital, algo que a diferencia de otras técnicas, no deja rastro en nuestro equipo, ya que la información la extrae el propio navegador …