El mediático “veto a Huawei” ha tenido una serie de aristas que abarcan múltiples escenarios. Pero, sin duda, una de los que generó mayor repercusión fue la del nuevo estatus de sus smartphones.
Cuando se conoció que, como consecuencia de las medidas de Trump, Google tendría que suspender sus suministros a la tecnológica china, el caso explotó y surgieron las dudas de los usuarios respecto a si sus teléfonos seguiría contando con Android y el resto de las aplicaciones de la empresa y si, a partir de eso, valdría la pena tener un smartphone Huawei.
Luego vinieron los primeros reportes de caídas en ventas y en las proyecciones de las mismas. Pese al inusitado nivel de presiones, ataques y acusaciones que recibía la multinacional, lo que podría haber tumbado a cualquier empresa, siempre se mantuvo sorprendentemente tranquila. Por eso nos preguntamos: ¿qué tanto está afectando esta situación a las operaciones en Latinoamérica?
Una cosa es clara. En cuanto se conoció el impacto que podría tener la relación con Google y su sistema Android, los usuarios se alteraron. Las ventas cayeron notablemente, una desaceleración inmediata; durante esos primeros días y lo común en los puntos de comercialización eran las consultas y preguntas de los usuarios. A partir de entonces, la empresa empezó con campañas de información, principalmente en sus redes sociales, tranquilizando a los consumidores respecto a la garantía de los equipos ya adquiridos y los que se encontraban comercializando. Ahora, la situación que viven es una tendencia a la normalidad, en una escalada …