Sin lugar a dudas, el gran momento de la entrega número 88 de los premios Oscar que se vivió el domingo pasado, fue cuando por fin, Leonardo DiCaprio fue galardonado como Mejor Actor por su trabajo en The Revenant. Evidentemente, la hazaña debía de ser festejada, cosa que provocó que el también protagonista de The Wolf of Wall Street olvidara su muy preciada estatuilla dorada en un restaurant.