Los astronautas, como cualquier otro ciudadano, tienen derecho a votar. Estados Unidos se ha encargado de que puedan ejercer su derecho aunque estén a cientos de kilómetros en el cielo.
Apenas faltan unas semanas para que llegue el día de elecciones en Estados Unidos y los ánimos ya están caldeados. Más allá de las cuestiones políticas, el mundo moderno nos plantea algunas cuestiones cuanto menos curiosas. Por ejemplo, en un país donde se toman tan en serio la democracia ¿cómo consiguen que todos sus ciudadanos tengan la oportunidad de votar? La cuestión no es sencilla, especialmente si te encuentras "atrapado" en un cubículo que orbita a más de 300 kilómetros sobre tu país. Pero el problema está resuelto y los astronautas ejercen su derecho a voto como cualquier otro. Así es como lo hacen.
El voto de un astronauta
El sistema es verdaderamente simple. Desde hace años, y dependiendo del estado, los ciudadanos estadounidenses tienen varias posibilidades de optar al "voto ausente", es decir, votar desde fuera de su estado o país de residencia. Los astronautas no son una excepción. El sistema, grosso modo, funciona enviando mediante diversas entidades y modalidades para recibir las "papeletas", rellenarlas y enviarlas de vuelta a las autoridades competentes, quienes ejecutan la votación. En el caso de los astronautas que quieren votar, este proceso funciona enviando dichas papeletas por correo electrónico seguro a la estación espacial internacional, en PDF.
Alejandro Mejía (Flickr)
Desde allí, los astronautas rellenan su voto y lo envían de vuelta al Control de Misión, situado en …