En medio de una profunda crisis socioeconómica, los venezolanos han encontrado una alternativa sorprendente: los videojuegos. Lejos de ser solo entretenimiento, estos títulos se han transformado en una fuente de ingresos en dólares. Este artículo explora cómo plataformas como RuneScape se han convertido en herramientas de supervivencia y examina las medidas que las compañías han implementado para regular esta actividad.