Si eres usuario de iPhone o Apple Watch, probablemente ya conocerás la funcionalidad Apple Pay que permite pagar mediante tu dispositivo móvil como si lo hicieras con una tarjeta de crédito.
A día de hoy, multitud de entidades como BBVA, Bankia, Bankinter, Caixabank, Evo, Ibercaja, ING, Kutxabank, Sabadell, Santander o WiZink ya se han unido a Apple Pay. Puedes añadir fácilmente sus tarjetas de crédito y débito a tu cartera electrónica Wallet y pagar desde el iPhone o Apple Watch.
¿Qué ocurre con las tarjetas emitidas por entidades que no se han unido a Apple Pay? En principio, podrías pensar que no hay nada que hacer pero, por suerte, sí que hay una solución.

El secreto está en utilizar una tarjeta intermedia que sea compatible
La forma de añadir una tarjeta que no está adscrita a Apple Pay es utilizar una tarjeta intermedia que sí que esté soportada por Apple Pay como la tarjeta Curve sobre la que publicamos un artículo hace unos meses.
La tarjeta Mastercard de Curve es una tarjeta física que te envían a casa y que no está asociada a ninguna cuenta bancaria, sino a una o varias tarjetas de crédito/débito de tu propiedad. Al pagar con la tarjeta Curve, se realiza el cargo en la tarjeta que hayas elegido en cada momento. La ventaja es que la tarjeta Curve sí que está soportada por Apple Pay.
En mi caso, cuento con dos tarjetas que no son compatibles con Apple Pay. Una de ellas es una tarjeta Iberia ICON (que permite …