El consenso es que los iMac son la joya de la corona de los ordenadores de sobremesa, pero la tendencia es la que es: el público va más hacia lo portátil para poder moverse con su ordenador. Y para ese caso, lo mejor para trabajar en casa es unirlo a un monitor.

¿Pero qué ocurre cuando en casa no tienes un monitor si no un Mac de sobremesa? Pues que también hay formas de usar ese Mac como monitor externo. Vamos a ver las formas que tenemos de conseguirlo.

Qué modelos de Mac pueden convertirse en un monitor externo

No todos los Mac pueden usarse como monitor externo de otro Mac, y hay que contemplar dos modos diferentes de hacerlo. Si quieres hacerlo con AirPlay, tienes que tener uno de los siguientes Mac como "receptor":

MacBook Pro o MacBook Air de 2018 y generaciones posteriores, incluyendo el MacBook Air M2
iMac de 2019 o posteriores, incluyendo el Mac mini M1
iMac Pro de 2017
Mac Pro de 2019
Mac mini M1 y Mac mini M2 o M2 Pro (con un monitor conectado, obviamente)

Si por otro lado quieres utilizar un cable para conectar tu Mac a ese otro Mac que quieres usar como monitor, entonces las exigencias son aun más fuertes porque sólo puedes usar algunos iMac antiguos:

iMac de 24 y 27 pulgadas de 2009 y 2010 con macOS High Sierra instalado
iMac de 2011, 2012, 2013 y mediados …