Dos visionarios de los años 60 plantearon la posibilidad de hacer carreteras inteligentes. 50 años después lo que hemos hecho es hacer los vehículos autónomos.
La conducción autónoma nace para evitar accidentes, pero hace muchos años ya se planteó como una medida para que pudieran circular más coches y el planteamiento sugería no hacer los coches autónomos sino las carreteras inteligentes, de esa forma no habría que cambiar de coches y todas las carreteras podrían de forma activa reducir los accidentes. ¿Qué ha pasado para que cambiemos de mentalidad? Casi 50 años en los que la tecnología ha dado un salto de gigante.
Robert E. Fenton y Karl W. Olson, dos ingenieros de la Universidad Estatal de Ohio, fueron los protagonistas de un artículo escrito hace casi 50 años en el que se hablaba de carreteras electrónicas, un concepto muy interesante que quería cambiar por completo la forma en la que se hacen las carreteras.
Las carreteras inteligentes ideadas en 1969
Foto: The Ohio State University
Para Fenton y Olson el transporte ideal sería público y basaría su modelo de transporte en el ferroviario de alta velocidad con un carril accionado eléctricamente y de forma inalámbrica y un sistema de transporte amortiguado por aire, unas palabras que suenan a Hyperloop, pero ideado en la década de los 60.
En su artículo también hablaban de la importancia del transporte privado y la libertad que ofrece, por lo que la tendencia para la década de los 80 sería alcista y el número de coches privados crecería un 60% …