Eterno.
Bob Dylan, flamante Premio Nobel de Literatura 2016, lo ha ganado porque ha hecho lo que ningún literato al uso ha conseguido: que la poesía llegue a las masas, porque aparte de escribirla, la cantó. Aunque en el imaginario colectivo los dos discos canónicos de Dylan sea Blonde on Blonde y el inmortal Highway 61 Revisited, hay Dylan mucho más allá de ellos. Ahí vamos con algunas canciones suyas que marcaron una época y cambiaron la música para siempre. No es un ranking de las mejores, porque sería imposible unanimidad incluso con uno mismo. Tampoco están todas las que son, pero sí son todas las que están.
Like a Rolling StoneLike a Rolling Stone es una canción llena de rabia, de ira, de reproche (ese How does it feel que sale del corazón) contra una mujer que simboliza a quien se ve expulsado de la vida fácil y cómoda. De la burguesía que en su momento no tenía empatía con quienes ahora le acompañan en su nuevo estrato. “Sólo pretendo sacarles de quicio”, dijo Dylan una vez sobre esta pieza.
Además de su significado, es una canción llena de experimenación: dura más de seis minutos (casi intrascendente en la era de Spotify, una provocación en la era de los LP y las radios) e introduce sonidos que, como todo el disco, viran del folk originario de Dylan hacia el rock eléctrico.
Este giro musical también forma parte de las interpretaciones del significado de la letra, el abandono a un estilo característico por …