Wind River es una película que, como lo hacen las buenas cintas, aprovecha la narrativa, el ambiente, los personajes y la trama, para abordar temas mucho más relevantes, ajenos a nadie y, en este caso, particularmente relevantes para quienes vivimos en México.

Y no es fortuito que Taylor Sheridan esté tras el proyecto. Probado director y guionista, Sheridan poco a poco se convierte en uno de los favoritos de Hollywood por su capacidad de crear personajes atormentados y complejos e historias que invocan la reflexión.

Honestamente, cuando me enteré que Sheridan estaba tras un nuevo proyecto, tras concluir el guión de Hell or Highwater (2016) mi ánimo se fue a los cielos, pero cuando me enteré que Jeremy Renner encabezaba el cast... pues... perdí un poco la fe.

Y es que aunque son muchos quienes dicen que si Jeremy Renner sale en una película, es sinónimo de calidad, nunca me había parecido mucho más que una cara bonita, capaz (eso sí), de interpretar personajes carismáticos.

Desde luego, Wind River me enseñó que no podría estar más equivocado.

Pero Renner es apenas el comienzo en la lista de aciertos de Taylor Sheridan para la construcción de su película. Lo acompaña una Elizabeth Olsen que lejos dejó ya a sus hermanas las gemelas, un telón de fondo muy ad hoc con el tono de la película, y un ritmo sereno, confiado y tenso, característico ya de Sheridan.

Los detalles de nuestra recomendación de la semana (sin spoilers), Wind River, en …