Windows 10 lleva tiempo siendo acusado de comprometer la privacidad de los usuarios con la EFF como principal paladín de la causa (acusaciones a las que Microsoft ya ha respondido). Lo cierto es que vivimos en una era donde todo está conectado y donde, para acceder a ciertos servicios, hay que hacer sacrificios. La privacidad es cada vez más volátil, a pesar de esfuerzos de activistas como los cypherpunks.
Además de lo que pueda hacer Windows 10, existen otras maneras en las que pueden estar vulnerando tu privacidad sin que lo sepas. Ya hay herramientas que vuelven Windows 10 más privado en un sólo clic, si bien hoy vamos a hablar de Blackbird, la solución más sencilla.
Este programa fue diseñado para que los usuarios tengan que evitarse horas desactivando características de Windows que se han considerado anti-privacidad. Para ello su autor desarmó Windows 10 por completo y lo analizó todo, creando una herramienta standalone que dejará el sistema operativo de los usuarios dócil, sumiso y poco invasiv
Blackbird actúa como un script que realiza todos los cambios de forma automática cuando la ejecutas en un ordenador con Windows. Viene en versiones de 32 y de 64 bits y soporta de Windows Vista en adelante.
Así funciona Blackbird
El programa muestra distintos elementos que modificará la primera vez que lo ejecutas, pero no da muchas descripciones. Se puede ver que monitoriza asuntos como los autologgers, las tareas programadas, la privacidad, los servicios o la telemetría, pero no se da …