El pasado mes de julio Warner Bros. recibió un aviso de la FTC estadounidense (Federal Trade Commission, Comisión Federal de Comercio) por violar la normativa de este organismo respecto a la promoción de productos. Al parecer, la compañía había pagado a varios youtubers por hacer vídeos con críticas positivas del videojuego Middle-earth: Shadow of Mordor.El escándalo no llegó a materializarse en multa, pero sí que originó un debate sobre la independencia y objetividad de las reviews de productos en los vídeos de YouTube, sobre todo cuando las hacen creadores de contenido considerados como influencers, con millones de seguidores en la plataforma de vídeo. Y, viendo el caso de Warner Bros, cabe preguntarse si ocurre algo parecido en España.
El caso de Warner Bros
La queja lanzada por la FTC contra Warner Bros acusaba a ésta de organizar una campaña publicitaria para dar a conocer el videojuego Shadow of Mordor, gestionada a través de su agencia de publicidad, Plaid Social Labs. Esta agencia, al parecer, contrató a una serie de reconocidos youtubers (entre ellos, por ejemplo, el propio PewDiePie) y les pidió que realizasen un vídeo sobre el mencionado título, con algunos requisitos, entre otros:
El vídeo deberás incluir gameplay de Shadow of Mordor
El vídeo tendrá una potente llamada a la acción para hacer clic en el enlace de la descripción que lleve a la web del videojuego
El vídeo promoverá un sentimiento positivo sobre el juego
El vídeo no mostrará bugs ni fallos del juego
El vídeo no comunicará sentimientos negativos sobre …