En 2016, Elon Musk, CEO de Tesla Motors, SpaceX, y The Boring Company, cofundó Neuralink, empresa que está desarrollando chips cerebrales habilitados con Inteligencia Artificial puedan interactuar con el cerebro de las personas.

Uno de los principales objetivos de la compañía es fabricar dispositivos para tratar enfermedades del cerebro. Para ello, se crea un microchip diminuto que, teóricamente, podía implantarse detrás de la oreja de una persona y, por medio de hilos diminutos, conectarse al cerebro.

Aunque no es una técnica nueva, ya que en 2012 se realizó con pacientes paralíticos que fueron capaces de controlar un brazo robótico. Pero Musk quiere ir más allá con Neuralink.

De acuerdo con el propio Musk, la compañía ha conseguido con éxito que un mono "controlara una computadora con su cerebro", y agregó que espera que Neuralink empiece a realizar pruebas en humanos a finales de 2020.

Business Insider conversó con neurocientíficos y comparte el punto de vista de ellos.

“Definitivamente hay algunos puntos explosivos y algunos aspectos mucho más realistas en ese anuncio", de acuerdo con Andrew Hires, profesor asistente de neurobióloga de la Universidad de California.

Después de atender la presentación de Neuralink en julio pasado, Hires tuvo la sensación de que Neuralink había mejorado las tecnologías existentes de tres maneras significativas.

Los cables flexibles suponen un avance en su campo debido a lo flexibles que son. Cada uno es ligeramente más delgado que un …