Además de posicionarse como una insignia en términos de estilo, innovación y diseño, Apple ha buscado convertir a sus productos en algo más que meros gadgets de comunicación o seguimiento. Desde hace un par de años, ha lanzado algunas funciones y herramientas que facilitan el monitoreo de la salud y quizás una de las apps más aplaudidas al respecto ha sido ECG.
Durante el tercer trimestre de 2020, el Apple Watch ganó esta función que permite, en la lectura más básica, hacer un electrocardiograma al usuario que porta el dispsitivo.
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Desde la página de soporte de Apple, la explicación deja en claro el valor de la función en términos de salud y prevención de problemas cardiácos:
«Con la app ECG, se pueden registrar los latidos y el ritmo cardiaco a través del sensor eléctrico de frecuencia cardiaca del Apple Watch Series 4, Series 5, Series 6 o Series 7 y, luego, se puede revisar el registro en busca de indicios de fibrilación auricular (FA), un tipo de ritmo irregular. La app ECG registra un electrocardiograma, que representa los pulsos eléctricos que hacen latir el corazón. La app ECG revisa esos pulsos para obtener la frecuencia cardiaca y verificar si las cavidades superiores e inferiores del corazón están sincronizadas. Si presentan un ritmo irregular, podría tratarse de fibrilación auricular».

De esta manera, hablamos de una función que sin duda puede salvar vidas. No obstante, en un inicio, la herramienta de salud se limitó a …