Mientras el mercado espera con ansia la llegada del iPhone del décimo aniversario, Apple mueve ficha en otro mercado, el de las tabletas, con un nuevo iPad que prescinde de la etiqueta «pro» que recrea funciones más potentes y evoluciona el anterior modelo Air 2 lanzado hace tres años, con lo que otra denominación, «air», pasará a mejor vida.
El nuevo dispositivo, de pantalla tecnología Retina de 9.7 pulgadas, es decir, el formato más conocido de tableta, ofrece una resolución de 2.048 x 1.536 píxeles (264 ppp) y 3.1 millones de píxeles, similar al modelo iPad Pro de las mismas dimensiones. Fabricado en un cuerpo «unibody» de aluminio y con un peso de 500 gramos, el nuevo modelo representa un pequeño salto cualitivo respecto a anteriores lanzamientos, pero una de las principales claves es, sin duda, su precio, que arranca en unos 399 euros en su versión Wifi, por lo que puede orientarse a un entorno educativo como herramienta de estudio y trabajo.
Según las últimas cifras de la consultora IDC, las ventas de tabletas cayeron por segundo año consecutivo hasta registrar el pasado año unas 174,8 millones de unidades, siendo el iPad el principal perjudicado pese a liderar esta categoría (una caída anual del 22%). Por esta razón, y de cara a incentivar las ventas, la actualización de la compañía se ha centrado, a grandes rasgos, en el precio, por lo que puede ser interpretado como un movimiento estratégico para consolidar el entorno educativo, en donde los Chromebooks son …