Hace tiempo que Apple se está distanciando de China. La que un día fue la fábrica del mundo está perdiendo clientes todos los días, y los de Cupertino están empezando a dejar de depender de ella. El exceso regulatorio, las limitaciones por la pandemia, las tensiones con Taiwán y más están provocando su particular fuga de capitales, que no parece que vaya a disminuir en el futuro próximo.
Apple está explorando otros mercados como la India y Vietnam, donde los costes de producción siguen siendo bajos comparados con los Estados Unidos o Europa, pero en los que la regulación, los problemas y las tensiones políticas son menores. Lo ideal sería que los de Cupertino fabricasen sus productos en EE.UU, y aunque ahora parezca inviable, se están tomando pasos en esa dirección. No para establecer líneas de producción completas, pero sí para algunos componentes clave.
Apple deja a China de lado por los Estados Unidos
En esta ocasión, Apple acaba de anunciar un acuerdo milmillonario con Broadcom para el desarrollo y la producción de componentes relativos al 5G en los EE.UU. Quizás este sea otra indicación de que los de Cupertino quieren dejar de depender de Qualcomm y trabajar en sus propios módems para los iPhone. Tim Cook ha dicho que:
"Estamos emocionados de hacer compromisos que aprovechan el ingenio, la creatividad y el espíritu innovador de la fabricación americana. Todos los productos de Apple dependen de la tecnología diseñada y construida aquí …